El síndrome de Piter Punk

Tal vez ya escucharon acerca de él en algún momento, y si no, pues resulta que el señor Piter Punk era un adolescente que vivía en la mágica casa de sus padres, la cual no podía abandonar porque si no envejecería y se convertiría en adulto. Y es que en esa casa no se tenía que pagar renta, no había restricciones y todo era juego y felicidad.

Resulta que este síndrome ataca a las nuevas generaciones, y por eso hay gueyes de 28 años (como yo) que no se quieren salir de su casa ni comprometerse con nadie, ni hijos, ni pagar rentas, ni nada de entregar cuentas, ni que ahora hay que ir de traje a trabajar y pararse temprano y pagar miles de impuestos y servicios pendejos del gobierno. Mejor andar de teni, escribir un blog y gastar el dinero en esas cosas tan bonitas que venden en los centros comerciales.

No es que no quiera crecer, pero las circunstancias económicas tampoco dan muchas posibilidades, eso de juntar un millón de pesos para comprar un departamentito de 2x2 en La del Valle no está fácil, y pensar en pagarlo a 50 años con mi crédito mediocre del trabajo, pues simplemente no es la onda. O sea que este Piter seguirá viviendo unos años más en la magia de los no compromisos.

.Fin.