martes, 22 de enero de 2008

El Ataque Del Ángel


Me encuentro sentado al borde la cama, mis manos tiemblan, mis músculos están contraídos y las lágrimas ruedan hasta caer a la alfombra creando un conjunto de manchitas que podrían parecer una explosión estelar.

El Ángel se aproxima, y después de su ataque nada quedará, es invencible, sólo existe un ser perfecto y bueno, Dios, él creo a los ángeles a su semejanza, pero estos no pueden ser perfectos por pura lógica, si lo fueran, serían dioses, nadie cree que puedan ser malos, nadie creería que un ser celestial está dispuesto a aniquilar a un hombre, de ahí que siempre se cometan los errores que acaban contigo:

1- No saber que puede pasar.
2- No saber cómo enfrentarlo.
3- Creer que no volverá a pasar.
4- Creer que la próxima vez se estará listo.
5- Seguir vivo.

Lucho en una batalla imposible de ganar, donde no sangro, donde no hay gritos, donde no hay dolor físico, donde no hay marcas. Es sencillo, después de probar el paraíso, cualquier lugar puede ser el infierno, esa es la misión del Ángel, mostrártelo, permitirte tocar el cielo, para después hacerte vivir en el peor de los infiernos.

El teléfono suena, apenas puedo estirar la mano y apretar el botón para contestar, su risa del otro lado de la bocina congela todo, lo vuelve blanco y silencioso, es ella, el ataque del Ángel.